LA ELECCION ENTRE EL CHONGO Y EL EX

Todos queremos la chancha, los veinte y la máquina de hacer chorizos. Verdad?
Todos queremos: todo, ahora y para mí. Quiero y quiero mil veces en cada vez que quiero.

Pero la vida trata de elecciones. La lucha entre el debo y el quiero. Autoexcluyentes la mas de las veces. Y cuando se elige indefectiblemente se llora por lo que se dejó. Si debo porque queria y si quiero por esa maldita culpa.

En los comentarios del post anterior hay quien eligió por la seguridad, quien eligió por el presente y quien descartó ambas opciones o hizo un mix. Y todos lo fundamentaron. Y muy bien, cada uno desde su vida, su edad, sus experiencias, sus prejuicios, sus necesidades y proyecciones a futuro.

Ella eligió por el chongo. Después de veinte años de matrimonio con un marido que siente como un hermano y muchas veces un hijo decidió quedarse con el chongo o el que le siga en turno. Mañana? No lo sabe, no le interesa, ya vendrá y en ese momento resolverá la situación. Hoy quiere lo que no tuvo en veinte años: sentirse hembra. Su asignatura pendiente.

Que es lo que hubiera elegido yo? Ya sé lo que es estar casada con un hombre que no te respeta. Sé lo que es un chongo. Sé lo que es remar sola la vida estando sola. Desde esta perspectiva elegí lo que nunca tuve: al ex, un buen tipo con el que pueda tener una estabilidad compatible con la etapa que vivo. Mi asignatura pendiente.